El desarrollo humano comprende la creación de un entorno en el que las personas puedan alcanzar su máximo potencial para llevar adelante una vida plena y productiva de acuerdo a sus necesidades. Las oportunidades de desarrollo humano van más allá de lo estrictamente material deben incorporar también el bienestar mental y espiritual, una sólida autoestima y el respeto por todo y todos los que nos rodean.
La felicidad no es un obsequio, es una recompensa que se gana con esfuerzo y disposición a aceptar lo que la vida nos pone de frente. Las personas felices saben que lo son solamente por un instante y se comprometen a invertir su tiempo en cosas duraderas e importantes. Hacer cosas por los demás o por aquello que tiene un valor superior a nosotros da sentido a nuestras vidas y nos permite sentir armonía ante una realidad que se muestra difícil si no hacemos algo por cambiarla.
Te recuerdo que no se puede andar por la vida sin rumbo fijo, si te sientes perdido lo mejor es trazar un plan que te permita alcanzar tus metas y llegar a donde quieres estar. Para ello debes reflexionar sobre lo que verdaderamente necesitas, fijar el momento en el que lo lograrás e identificar los recursos que servirán a tu propósito. El futuro se define en el aquí y el ahora y si no tomas la iniciativa poco podrás hacer por materializar tus sueños. Déjame ayudarte a trazar ese plan, un buen inicio esta al alcance de tus manos si cuentas con el consejo apropiado.